lunes, 12 de febrero de 2018

Exclusivo: en una reunión secreta se definió la fórmula De la Sota-Urtubey

Aunque se trate del secreto mejor guardado y se lo haría público recién antes del Mundial de Fútbol, en el peronismo ya existe casi pleno consenso para ir fogoneando la fórmula presidencial del 2019. Algunos la llaman "prenda de unidad". Sería el tándem De la Sota-Urtubey los encargados de presentar batalla a Cambiemos a nivel nacional. En tanto, Sergio Massa se convertiría en el hombre para enfrentar a María Eugenia Vidal en el territorio bonaerense.



La información exclusiva a la que tuvo acceso Diario Full, tiene su raíz en la confidencia de un importante político platense que supo ser una de las espadas más filosas del ex presidente Eduardo Duhalde y que participó de una reunión, en un marco de la más absoluta confidencialidad, con un enviado del Papa Francisco que llegó al país para llevarse un cuadro de situación de la grieta ideológica y la situación social.
Muchos se preguntarán el por qué de esa presencia vaticana. El episodio, según la fuente,  ocurrió en mayo del 2017. El escenario fue en un lujoso piso de la capital federal. Allí, de acuerdo a la fuente, se reunieron Eduardo Duhalde y otros hombres de peso del peronismo, con el representante del Santo Padre. El prelado, venía a manifestar la inquietud del Papa por la situación de la Argentina, frente al creciente endeudamiento con los organismos internacionales, la conflictividad social y gremial, la inflación y los niveles de pobreza. 
Si bien se coincidió en que la situación no se asemeja ni por asomo con lo que ocurrió en el 2001 durante el gobierno de la Alianza, en la charla se encendieron algunas luces amarillas sobre un hipotético escenario de crisis. Se planteó entonces el vacío de dirigentes de fuste para ponerle paños fríos a un mosaico de zozobra institucional. Según la fuente que hizo la revelación, se remarcó que en el 2001 estaban Raúl Alfonsín y Eduardo Duhalde, dos lideres que se unieron para evitar la disgregación de la Argentina. Pero se abordó que contrariamente hoy no hay dirigentes con esa cintura. En la misma dirección se evaluó que el hoy denostado movimiento sindical en aquel momento hizo un gran aporte. No obstante, la duda es si hoy ese espacio devaluado por las circunstancias que son de público conocimiento, sería capaz de capear una situación límite.
 
LA CONFLICTIVA RELACION DE MACRI CON EL PAPA
 
Aunque todos los involucrados promueven una relación institucional lo más sana y estable que sea posible, se coincidió en que la Casa Rosada y los obispos tienen en claro que Francisco y Mauricio Macri no se quieren. Existe respeto entre ellos y una actitud pública permanente de reconocimiento del Presidente hacia el Papa. Pero ambos abrigan diferencias personales, ideológicas y políticas que quizás jamás se resuelvan.
Con esas mismas disidencias fueron capaces de convivir seis años, cuando Jorge Bergoglio era arzobispo de Buenos Aires y Macri gobernaba la Ciudad. La pretensión del Gobierno es no bajar un solo escalón en ese estatus. No parece un objetivo sencillo de alcanzar.
El último episodio áspero que los memoriosos recuerdan, fue el frío y formal telegrama, para colmo escrito en inglés, con que el Papa saludó al Presidente mientras sobrevolaba nuestro país rumbo a Chile, donde cosecharía niveles inéditos de conflicto. Ese texto fue muy diferente a los entusiastas textos que en su momento había dedicado a Cristina Kirchner. Fue el cuarto viaje de Francisco a la región en sus casi cinco años de papado, sin pasar por la Argentina.
En la charla secreta con el delegado del Papa registrada a mediados del año pasado, se lanzaron posibles nombres  para conducir al peronismo mirando hacia el 2019. En ese barajar y dar de vuelta, todos los caminos llevaron hacia el cordobés Juan Manuel de la Sota, el último de los veteranos de esa camada de dirigentes históricos y con vasta experiencia en la gestión. Cuando se lo consultó, De la Sota zorro viejo, propuso el nombre de Juan Schiaretti, el actual mandatario cordobés. Hay quienes aseguran que lo hizo con la intención de ver como medía. De la Sota viene de un año sabático, donde lanzó su marca de ropa masculina (foto). Pero todo indica que saldrá al ruedo con amplio consenso, inclusive del kirchnerismo y los movimientos sociales, haciendo dupla con Juan Manuel Urtubey, que no tiene reelección en su provincia y cuenta con muy buena imagen.
 
PREPARADO PARA LA PRESIDENCIA
 
"Sólo me falta ser presidente de la Nación y para eso me preparé, me sigo preparando y trabajo cada día", señaló De la Sota, hace poco tiempo y destacó que ya fue electo diputado nacional por dos períodos; embajador en Brasil, senador y tres veces gobernador de Córdoba.
"He querido ser presidente de la Nación y no lo he logrado. Eso no quiere decir que uno no lo intente nuevamente si realmente siento que tengo cosas para brindarle al país, para unir a la Argentina, para terminar con estas divisiones que generan resentimiento y hacen tanto daño", deslizó. Consultado sobre la situación del país, contestó que lo ve "con preocupación", porque "tanto desde la pseudo-izquierda que encarnó el kirchnerismo como desde algunos fanatismos del nuevo gobierno se ahondan las diferencias".
Urtubey y De la Sota ya han mandado algunas señales de coincidencias sobre la manera de concebir la política.“Tenemos la misma mirada con De la Sota sobre el futuro de la Argentina. El objetivo tiene que ser la Argentina por delante más allá de donde viene cada uno. Hay que dejar de pensar las elecciones como un concurso de belleza y ver qué futuro se quiere”, apuntó Urtubey en su momento.
“A pesar que hoy estamos en una sociedad enferma de violencia, lo mejor está por venir si la clase dirigente se pone de acuerdo en una manera de actuar. El próximo gobierno debe reconciliar a los argentinos y establecer reglas de juego sobre la base del respeto”, aseguró De La Sota. “Reconciliar la Argentina es pasar de la soberbia a la humildad”, agregó.
 
LA CAMPORA DENTRO DEL ARMADO
 
El informante que acercó el testimonio exclusivo a Diario Full, mencionó que después de intensas consultas, "existe consenso en que esa fórmula resulta hoy la más atractiva para todos los sectores y la ansiada prenda de unidad que se empezó a buscar en el partido. En ese marco, también Cristina estaría dispuesta a hacer su aporte y dar un paso al costado, aunque dejando la pata de La Cámpora dentro del futuro armado".
La misma fuente añadió que "para la provincia de Buenos Aires, el hombre indicado para dar la pelea por la gobernación es Sergio Massa, quién ya habría dado el visto bueno.Solo el peronismo unido puede desplazar a Cambiemos del poder y Massa ya demostró que tiene fortaleza política y equipo para darle la gran pelea a María Eugenia Vidal".
En el peronismo creen que es el mejor momento para salir a la cancha, ya que la imagen de Macri ha caído 10 puntos después del diciembre negro donde se aprobó la reforma jubilatoria. También se sostiene que Cambiemos cosechó muchos votos en esa franja, que ya no van a estar. Idéntico cuadro de situación se da con los empleados del Banco Provincia que perdieron una de sus máximas conquistas con la ley de retiros en el Bapro. Además aún está latente la sospecha que el gobierno de Vidal intente la misma metodología en el Instituto de Previsión Social. Si se suma a todo este coctel, el monumental revalúo inmobiliario, los impuestazos y el tarifazo en los servicios, el terreno aparece fértil para el nacimiento de una propuesta superadora. " Todo el peronismo unido, es la carta de triunfo", finalizó el informante.

No hay comentarios: