Además, se ha convertido en el terror de varios intendentes del PJ, a los que tiene denunciados ante la justicia por supuestos actos de corrupción. La legisladora siempre "vendió" con capítulos enigmáticos. Aún cuando deja picando una reflexión a medias y guiña un ojo en los reportajes. Pero recién el escenario en el que jugará, lo definirá para Semana Santa. Allí están puestas todas las miradas de sus oponentes. De allí en más, decidirán las estrategias futuras. En la Gobernación, también sonaron las alarmas por los efectos que podría tener sobre la figura de María Eugenia Vidal, un eventual triunfo de la chaqueña.
Mientras tanto, Sergio Massa vela las armas y aguarda la definición del oficialismo. En el caso de que sea Lilita, es probable que le deje la candidatura a Margarita Stolbizer, como lo adelantara en su momento a DIARIO FULL. La mayor ambición del tigrense, es acceder en el 2019 a la Casa Rosada. La propia Cristina Kirchner también esconde sus cartas y espera las definiciones de Massa y Carrió. Una campaña sería con todos ellos en carrera, y otra con los dos, o con uno, fuera del campo electoral.
Carrió tiene una sola estrategia: una interlocución directa con Mauricio Macri y con él decidirá a solas su futuro. Nadie más, incluso la propia María Eugenia Vidal, hoy dueña del territorio más codiciado en octubre. No es casualidad, la chaqueña apunta a sacar de la grilla de opinólogos a Jaime Durán Barba . El gurú ecuatoriano quiere dar la gran pelea en su mayoría con candidatos puros del PRO. Carrió teme que si eso ocurre, sus socios radicales podrían saltar ofendidos a la vereda de Massa, quien ya en el 2015 estuvo a un paso de seducir al partido centenario. Si se diera esa circunstancia, Carrió quedaría frente al dilema de definir su situación dentro de la coalición y podría quebrarse Cambiemos.
EL PRIMO JORGE NO ES SANTO DE SU DEVOCION
No obstante, Durán Barba no es la única piedra en el zapato para la chaqueña. Otro de los que aparece en escena es el intendente de Vicente López, Jorge Macri, aunque ella da por hecho que no será candidato en la Provincia. Si ello ocurriera, Lilita se abstendría de participar en la elección.
Lo que acordó con el Presidente, es que supervisará la calidad moral, no partidaria, de los candidatos que la acompañen en la boleta y siendo cabeza de lista, no se aceptará nadie que este flojo de papeles. Carrió confía a rajatabla en la honestidad de María Eugenia Vidal, pero no en algunos de sus ministros. De todas maneras, la resolución de su candidatura deberá pasar por el escenario que se de en la capital federal. En ese territorio, el peligro para el oficialismo no es Cristina, ni Massa, sino Martín Lousteau. Extrañamente, el actual embajador en Washington, no se presentaría en la Ciudad, si la postulante porteña de Cambiemos fuera Carrió. Si se cierran las puertas de Cambiemos para Lousteau, con el apoyo de los radicales el diplomático terminaría enfrentando al oficialismo de Macri, algo sumamente riesgoso para Cambiemos.
LOS TEMORES EN LA RESIDENCIA DE LA CALLE 6
No obstante, las versiones señalan que legisladora le aseguró a su entorno, que no quiere hacer " manoseos legales" y que como tiene domicilio constituido el partido de Exaltación de la Cruz, competirá en territorio bonaerense o en ningún otro lado. La caprichosa fiscal y auditora de Cambiemos, como algunos la denominan, mantendrá el suspenso hasta Semana Santa.
Frente a este cuadro de situación, en la gobernación pronostican frente de tormenta y el ambiente se tornó tenso. Ante el posible desembarco de la vehemente legisladora, los asesores de María Eugenia Vidal, temen un escenario complicado. Aseguran que Lilita, que tildó de "delincuente" a Jorge Macri, si le gana a CFK, podría terminar vaciando de poder político a la propia Vidal.
La hipótesis que da vuelta como un trompo, es que si triunfa, Carrió podría convertirse en la jefa moral y política de Cambiemos en la Provincia, justo a mitad de camino del mandato de Vidal. En medio del espinoso conflicto docente, que tiene efectos dañinos sobre Vidal, la posible explosión de Carrió al estrellato bonaerense, sería letal para la joya más preciada por el PRO. Esta posibilidad, de terminar con la figura que más mide en Cambiemos, ha provocado una suerte de amotinamiento de las primeras espadas del vidalismo, que por estas horas reman para convencer al gobierno nacional que la jugada tiene riesgos detonantes.
EL HOMBRE QUE QUIERE ASEGURAR EL TRIUNFO
Emilio Monzó, el titular de la Cámara de Diputados también se metió en la polémica y después de hacer una autocrítica, señalando que la imagen de Mauricio Macri cayó diez puntos, le dio su respaldo a Carrió. Monzó señaló que "lo que quiere Carrió al igual que yo, es que en la provincia de Buenos Aires no fallemos. No tengo nada contra Jorge Macri, pero hay que asegurar el triunfo", aclaró el hombre de Carlos Tejedor, quien le puso todas las fichas a la líder de la Coalición Cívica.
"Más protagonismo que el que tiene Carrió es imposible. Trasciende fronteras. Si perdemos con Jorge Macri, pierde un Macri y seríamos pasto de la oposición", enfatizó. Monzó sabe que si el oficialismo muerde el polvo en la madre de las batallas, las posibilidades de Macri para una posible reelección en el 2019, son virtualmente nulas.
Carrió tiene una buena relación con Vidal, pero le espanta la búsqueda de entendimiento que se impulsa con figuras del peronismo tradicional pensando en la reelección de octubre. Le hace ruido que la mano del ministro de Seguridad, Cristian Ritondo de buena llegada al PJ, esté detrás de esos ensayos. Lo concreto es, que la propia gobernadora mandó a explorar ese territorio y por estas horas allí hay operadores del PRO hablando con intendentes de larguísima historia como Alejandro Granados y Mario Ishi.
LA APARICION DE DUHALDE EN EL ESCENARIO
También es un secreto a voces que Eduardo Duhalde forma parte de la movida. La intención es armar una colectora que lleve a su esposa Chiche como candidata a senadora y de esa manera colaborar también para dinamitarle el camino a Cristina. El 30 de abril es el último día.Allí cierra el plazo para realizar modificaciones en el padrón, por lo que Carrió deberá apurar el trámite de cambio de domicilio su pretende ser la candidata a senadora nacional de Cambiemos por la Provincia. La legisladora chaqueña actualmente está empadronada en la Capital , pero hace dos años se mudó a una chacra en Exaltación de la Cruz. Como aún no ha hecho el cambio de domicilio, hoy sólo podría ser candidata por la Ciudad o por el Chaco, de donde es oriunda.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, tiene otra visión. Cree que no hay que exponer a figuras rutilantes como candidatos. Sostiene que bastará como pantalla la imagen positiva de Vidal. En cambio, desde la otra orilla, el ala política de la coalición contesta que es una ingenuidad. "Si la candidata del Pj es Cristina, la única capaz de ganarle es Lilita", aseguran. Muestran una encuesta reciente que le acercaron a Macri, donde en primer lugar figura Cristina con 35 puntos, seguida de cerca por Lilita con 32 y en el tercer lugar se ubica Sergio Massa, el líder del Frente Renovador. Macri cree que la líder de la coalición Cívica va a polarizar bien con su discurso anticorrupción contra CFK. Y que incluso si pierde pero hace una buena elección, el gobierno sumará jugadores y salvará la ropa. Un panorama muy distinto al de las aspiraciones de Vidal. En La Plata insisten que Vidal no se definirá públicamente por ningún candidato, hasta que llegue el momento de armar las listas.
CON LA SALUD QUE LE JUEGA EN CONTRA
De todas maneras, la deteriorada salud de Carrió es la única circunstancia que podría dar un vuelco y sacarla de Provincia, frente a una campaña extenuante.Ella misma admitió que no se encuentra en el mejor estado. No obstante, el tema lo decidirá en una charla a solas con Macri, dejando afuera a la gobernadora. Otra de las alternativas, siempre de la mano de Lilita, es que el PRO sacaría a la cancha al fiscal José María Campagnoli. "Ya en los años 90, yo decía que si alguna vez soy Presidente, quiero que el procurador general sea Capagnoli", dijo Carrió en una reciente entrevista, poniendo de manifiesto su admiración por el funcionario judicial.
Otra de las figuras en la grilla, es la ministra de Bienestar Social de la Nación, Carolina Stanley de muy buena relación con las organizaciones sociales. Lo cierto es que cualquiera de ellos, con Vidal como madrina, deberán transitar y mostrarse en los 36 distritos más importantes. El primero es La Matanza y el último es Azul.En ese amplio territorio ya se empezó a realizar un seguimiento de todo lo que sea medible, como ser: imagen de los candidatos, entrega y escrituras de viviendas, obra pública local y provincial, avance del PROCREAR, aceptación del programa Acercarte y cuántas veces estuvieron Vidal y sus ministros en esos lugares.
Frente al constante reclamo de los intendentes por obras, habrá un nexo entre el Gobierno nacional y los municipios para agilizar la gestión de cara a a las elecciones. Se trata de Natalia Zang, subsecretaria de Evaluación y Proyectos con Financiamiento Externo. Se trata de una funcionaria de estricto perfil bajo y de extrema confianza del vicejefe de Gabinete, Mario Quintana. Zang trabajó durante años como directora financiera de Farmacity, junto a Quintana, integró el fondo Pegasus y luego emigró como Ceo a Jazmín Chebar, hasta que fue convocada por el funcionario para sumarse al elenco macrista.
En Cambiemos, los tiempos se acortan de manera dramática. El padrón con todas sus incorporaciones y cambios cierra el 30 de abril y el plazo para inscribir las precandidaturas vence el 22 de mayo. El calendario avanza inexorablemente y Carrio, la gran figura en discusión, ha puesto como fecha límite para quebrar el suspenso, Semana Santa. Para entonces, bajará el martillo y se podrá saber si la casa esta en orden o si Cambiemos empezará a caminar por las arenas movedizas de las intrigas partidarias.
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