martes, 29 de noviembre de 2016

Balas que pican cerca de Bressi y el oscuro camino de los sobres de la maldita policía

Para Marcelo Martini, el escándalo de los sobres con dinero sucio secuestrados en la Departamental La Plata, obliga a ir lo más alto posible. El fiscal quiere que salte pus y se destape definitivamente quien es el jefe de la gran la olla de la corrupción bonaerense. El funcionario judicial, arriesgó su postura frente a la detención de los ocho comisarios ocurrida en las últimas horas. Disparó que el episodio “contradice la ley de gravedad y va para arriba”.


Martini olfatea que existe una cadena de complicidades con funcionarios de mayor peso dentro de la fuerza y que el  final del camino podría llevar inexorablemente al jefe máximo de la Bonaerense, Pablo Bressi. Con las mismas coordenadas que Elisa Carrio, Martini contó que va a elevar un informe a Asuntos Internos. Su hipótesis es que la cabeza máxima de la Bonaerense "no puede desconocer algo tan grave sucediendo en la capital provincial. Si surgen indicios en el expediente se lo citará”, reconoció. Tal vez el fiscal esté en la dirección correcta, ya que se descubrió hace pocos días una operatoria similar a la de La Plata, en una comisaría de Almirante Brown.
LA PUNTA DEL OVILLO
La causa más grave por la que se imputó a los nueve comisarios platenses, es la de “asociación ilícita” y  Martini intuye que “debe haber muchos implicados más”. Más allá de las denuncias anónimas, se llegó a la punta del ovillo de la complicada madeja por testimonios logrados en un supermercado chino y una remisería. En esos ámbitos denunciaron que se les pedía dinero a cambio de seguridad. “Hay muchos comerciantes que me dicen lo mismo, pero que no declaran por miedo. El destino de los fondos no se sabe, pero obviamente era para beneficio de ellos”, agregó el fiscal Martini.
Ocho jefes policiales que prestaban servicio en La Plata quedaron detenidos el miércoles por la noche tras la resolución de la Cámara Penal que rechazó los pedidos de eximición de prisión. Están acusados de cobrar coimas, causa que se inició tras el hallazgo de 36 sobres en un despacho de la jefatura Departamental local con 153.700 pesos. Se tiene la certeza que el dinero era recaudado como protección del juego, la droga y la prostitución. En total son 9 los apuntados. Queda un prófugo, el ex titular de la seccional Sexta, Julio Sáez.
LAS PENAS QUE PODRIAN RECIBIR
 Los detenidos son Darío Camerini (ex Jefe Departamental); Rodolfo Carballo (segundo jefe); Ariel Huck (jefe de Operaciones); Walter Skramowskyj (secretario) y los comisarios Raúl Atilio Frare (12ª); Federico Jurado (16ª); Sebastián Velázquez (2ª) y Sebastián Cuenca (3ª).  Todos están vinculados con maniobras propias de una asociación ilícita, dedicadas a obtener grandes sumas de dinero, estimadas en unos doscientos mil pesos mensuales.
Los jueces Alejandro Villordo, Carlos Silva Acevedo y Carlos Argüero les imputaron ese delito que prevé penas de hasta 10 años de prisión para sus integrantes y 15 para el responsable de la organización. El pedido del fiscal fue ratificado por la Sala III de la Cámara de Apelaciones, que rechazó los planteos de eximición de prisión presentados por la defensa de los policías y ordenó las detenciones. 
El operativo se puso en marcha después que Martini diera intervención a la Auditoría General de Asuntos Internos bonaerense, que inmediatamente desplegó cinco grupos para atrapar a los jefes. Pasada las 18 cayeron los primeros cuatro comisarios. Y al caer la noche, el resto se presentaron en la Delegación Departamental de Investigaciones y quedaron a disposición de la Justicia. Sus abogados habían anticipado a la Justicia que los sospechosos tenían la intención de entregarse voluntariamente.
EL TURBIO CAMINO HACIA "LA CLOACA"
 La investigación, de la que dimos cuenta a través de numerosas notas en DIARIO FULL,  comenzó el 26 de febrero último con un llamado anónimo a la Dirección General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense. El denunciante anónimo dio amplios detalles y fue contundente al señalar que  los primeros días hábiles de cada mes desde las distintas comisarías de La Plata se enviaban sobres con dinero para el titular de la Departamental y otros jefes de esa repartición. A la operatoria mafiosa de recaudación, algunos la llamaban "la cloaca", por el lugar donde convergía el dinero sucio. El auditor general Guillermo Berra comenzó entonces a indagar a fondo en el caso.
 Con la estrategia armada, el 1º de abril las autoridades pusieron en marcha un megaoperativo.Se allanó entonces sorpresivamente la Jefatura Departamental. Allí se secuestraron 36 sobres que contenían 153.700 pesos. Ante la enorme conmoción que despertó el caso, los jefes acusados fueron desplazados de sus cargos, pero sus abogados lograron evitar sus arrestos. No obstante, el miércoles la Cámara rechazó sus pedidos de eximición de prisión. El caso no es aislado y obliga a pensar que el sistema de recaudación se replica en otras comisarías del conurbano bonaerense.
LA OTRA OLLA EN ESPEJO, EN ALMIRANTE BROWN
 Por ejemplo, la semana pasada se destapó otra olla en la delegación administrativa de Almirante Brown, donde el comisario Lorenzo Hilario Martín maneja el dinero que se reparte en horas adicionales, en el Operativo Sol y en dispositivos especiales de fines de semana largos. Durante un allanamiento que también ordenó Asuntos Internos, se encontraron curiosas irregularidades, entre ellas más de 100.000 pesos en efectivo a mitad de mes (cuando "la norma" es la falta de efectivo en las dependencias operativas), documentos que precisaban pagos y objetivos con exhaustivo detalle y, en el despacho del jefe, una escopeta con pedido de secuestro en una causa de robo y privación ilegal de la libertad. Por estas horas, el Ministerio de Seguridad evalúa desafectar al comisario. Pero además tiene en la mira a la mitad de los 30 delegados administrativos de la policía bonaerense. 
Durante la requisa, hubo cuestiones que llamaron la atención del jefe de Asuntos Internos, Guillermo Berra, y del fiscal de Lomas de Zamora Gerardo Loureiro. Se trata de un listado con nombres, direcciones, horarios y montos de dinero "con mucho detalle" que serán analizados minuciosamente para saber si se trata de un sistema de cobro de coimas; facturas y documentación de una agencia de lotería en la caja fuerte. Las irregularidades fueron comunicadas a Ignacio Greco, un civil que desde el mes pasado maneja la administración de la policía. Se cree por estas horas que Greco podría intervenir la delegación de Almirante Brown, poniendo al mando a un civil. Al igual que en el caso de La Plata, la maniobra la ventiló una mujer policía se presentó en Asuntos Internos para denunciar las irregularidades.
TODO QUEDABA EN FAMILIA
Hay que decir que en el marco de la limpieza que ordenó la gobernadora María Eugenia Vidal y el ministro de seguridad, Cristian Ritondo, hace unos 40 días que dejó de existir la Superintendencia de Coordinación Administrativa, que estaba al mando de Néstor Martín. Este comisario general  integraba la cúpula de la fuerza y fue investigado por Asuntos Internos por enriquecimiento ilícito luego de que presentara una declaración jurada que incluía siete propiedades y un helicóptero experimental, además de más de dos millones de pesos en efectivo.
 Cuando Néstor Martín declaró ante Asuntos Internos dijo no tener ningún tipo de vínculo "con un tal Lorenzo Hilario Martín, delegado administrativo de la policía en Almirante Brown". Sin embargo, además del helicóptero y las siete propiedades, Néstor Martín tiene una sociedad con Lorenzo Hilario Martín. Según sospechan desde Asuntos Internos, serían primos o tendrían algún grado de parentesco. La sociedad se llama "Smart SRL alarmas". Se dedica a la venta de productos de seguridad privada. Lorenzo Hilario es comisario inspector de la policía bonaerense y declaró tener ocho propiedades -algunas de ellas, lotes en Gualeguay, Entre Ríos-, 30.000 dólares, 140.000 pesos en un depósito y una camioneta Toyota Hilux. 
La ex superintendencia de Coordinación Administrativa que manejaba Néstor Martín tenía a su cargo los operativos Sol e Invierno y los de fines de semana largo y Pascuas, con una caja de 500 millones de pesos anuales. Contaba con 30 delegaciones que ahora dependen de la Subsecretaría de Administración del Ministerio de Seguridad, al igual que el personal que trabajaba en aquella superintendencia.
Aunque ahora la administración de la policía esté en manos del civil Greco, las 30 delegaciones siguen siendo manejadas por policías. El panorama para ellos es complicado, ya que más de la mitad de esos delegados son investigados desde Asuntos Internos por enriquecimiento ilícito y malversación de fondos. Y lo más grave, es que ahora nuevamente hay balas que pican cerca del jefe máximo de la Bonaerense, Pablo Bressi.

No hay comentarios: